En lugar de la división preexistente de las tres tribus, todos los ciudadanos fueron divididos en cuatro tribus urbanas y 16 -17 rusticas.
Estas tribus se reunían en los comicios por tribus y trataban asuntos de menor importancia que los tratados por los comicios por curias. El voto era emitido por tribus y por esto los plebeyos tenían la preponderancia, siendo 16 las tribus rusticas, y siendo habitadas las tribus rusticas en su mayor parte por plebeyos.
De las tribus urbanas se recuerdan los nombres: Collina, Suburana, Esquilina, y Palatina. (José Arias, Manual de derecho Romano; Ed. Guillermo Kraft, Buenos Aires, 1943, Pág. 39).
A los comicios curiados del régimen anterior vemos que se agregan otros comicios: los comicios centuriados (la introducción de estos comicios, por algunos autores se atribuye a Servio Tulio).
Los poseedores fundiarios fueron divididos en cinco clases. A la primera clase pertenecían las personas que poseían 20 yugadas (yugada es el espacio de tierra que puede arar un par de bueyes en un día, cerca de 20800pies cuadrados); a la segunda: 15 yugadas; a la tercera: 10 yugadas; a la cuarta: 5 yugadas; a la quinta: 2 yugadas.
Cada clase estaba después ordenada militarmente en centurias (compuestas de “iuniores”: (más jóvenes) desde los 18 a los 46 años y “seniores” (más ancianos) desde los 46. La primera clase tenían 80 centurias; la quinta 30; las otras 20.
Precedían la primera clase 18 centurias de caballeros. Además, hay que añadir 5 centurias de auxiliares formadas de personas que no poseían lo requerido para ser adscriptas a una clase pero que todavía tenían bienes para estar obligados a pagar un tributo al Estado, para poder ser todavía “assidui” (dadores de ases al Estado).
(En condición inferior se encontraban los proletarios, quienes tenían sus hijos al servicio del Estado, ya que no tenían la posibilidad de pagar tributos).
Tenemos así 193 centurias que pagaban tributo proporcional a sus propias riquezas.
Estas centurias se reunían por motivos de elección, legislativa y militares en el campo de Marte, en comicios por centurias.
Participaban también los plebeyos, pero bien reducida era su misión, ya que se votaba por orden de riqueza. Así que cuando los caballeros y los de primera clase estaban de acuerdo en las votaciones no había más necesidad de llamar a las otras centurias a manifestar su parecer.
(Los comicios curiados, compuestos de solo patricios, tenían poderes más reducidos)